jueves, 22 de mayo de 2014

22 de mayo 2014

STAND UP: CÓMO HACER REÍR PARADITO FRENTE AL PUBLICO
Género históricamente vinculado con la televisión estadounidense, de a poco llegó a nuestro país para quedarse. 


Flavio Katzev era periodista de rock, escribió un libro y trabaja en otro. Sin embargo, conoció el stand up y se animó a subir a un escenario para hacer reír a la gente a través de sus monólogos.
Hoy en boga en nuestra televisión, el género tiene muchos años de vida y parece haber finalmente salido del under para llegar a jugar en las grandes ligas. 
Aquí Flavio nos mete en el fascinante mundo de los que se esfuerzan por sacarnos una sonrisa y no morir en el intento….
 -              ¿Cómo te metés en el mundo del stand up?
-              Bueno, si bien andaba por el lado del periodismo de rock, siempre fui de hacer chistes. Arranqué con teatro un par de años y siempre me decían que tenía que hacer stand up. Hasta que averigüé y arranque a estudiar. Y después el profe te larga al ruedo… 
-              Más allá del furor actual, es un género que tiene muchos años, fundamentalmente en el mercado estadounidense...
-               Sí, es verdad que tiene furor allá, pero la verdad que nunca le di bolilla porque adoro el castellano y nuestras costumbres. No soy de los que se ponen a ver videos en YouTube traducidos. Hace décadas que iba a teatros como Liberarte, que tenían estos espectáculos y veía a Pereyra, Lumbardini, Alfonso, Hugo Fili, y otros. 
-              -¿Qué situaciones o climas planteás en tus actuaciones?
-               En mi caso yo antes hablaba del vocabulario, de lo mal que hablamos los argentinos, en un espectáculo que denominé “Bocavulario” (mal escrito con doble intención). Y mi show actual, “El síndrome de las 3 P” me refiero a mi estado habitual que es ser Petiso, Peludo y Panzón. 
-              -¿Es un estilo netamente humorísrtico o existen otras vetas?
-               A mí me parece que el humorista tiene que hacer reír. Como sea, pero tiene que hacer reír. La mayoría que hace stand up te cuenta una historia cómica, intentando causar gracia sin hacer. En ambos espectáculos hice lo que se denomina “one line”, es decir chistes en una línea. No se estila demasiado, pero por ahora es lo que me sale, aunque ya estoy estudiando y preparando algo del otro estilo. Por ejemplo está Merpin, que hace magia pero te retorcés de risa, es un capo el flaco. O sea que se puede hacer de todo, pero haciendo reír. 
-              ¿Cómo es la recepción por parte del público hacia tu trabajo?¿Se engancha de entrada o existen públicos difíciles?
-              Yo llevo algo más de 20 shows, “Bocavulario” fue una experiencia nueva, con aciertos y errores, donde tu desesperación por estar más tiempo en escena te juega en contra. Y ahí te das cuenta que tu profesor tiene razón en todo lo que dice. Me está yendo mejor con “El síndrome” porque estoy más experimentado, aunque veré cómo funciona contar historias y no meter chistes. En fin, un desafío. Hay públicos difíciles. Un martes a la noche, invierno, diez personas y arrancamos a medianoche. Fue complicado. Igual yo me preguntaba si esos que fueron, a esa hora, un día de semana y con un frio bárbaro, no se reían demasiado… ¿fueron a ser torturados?. Yo ni gratis, al otro día tengo que trabajar temprano. ¡Para un pibe de 20 todo es rock and roll! 
-              Una anécdota
-              Dos veces me pasó que me tocaba subir a mí y el presentador dijo otro nombre. Entre los nervios previos, lo único que te falta es que cuando esáas por saltar a escena, le pifien el orden establecido…
-              ¿Hay grandes referentes en el orden nacional del género?
-               Bueno hay gente famosa que hace stand up, porque hacen radio o son actores, como Sebastián Wainraich, Juan Acosta, Malena Pichot. Viven de eso. Yo la verdad no tomo a nadie de ellos. Ni por buenos, ni malos, ni conocidos. Primero seguí las enseñanzas de Carlos Balmaceda, mi profe debut, un tipo muy grosso. Y ahora estoy estudiando, cuando el tiempo así lo permite, con Eddie Pascualini que tiene una manera de expresarse en escena que realmente atrapa al espectador. Yo hago lo que me sale y con la única idea de hacer reír. Si yo no me siento a gusto con lo que hago, imposible hacer sonreir a los demás.

No hay comentarios:

Publicar un comentario